viernes, 24 de septiembre de 2010

La selección

Del libro en producción "Ibara, escuela de magia"

Estoy seguro que se preguntó anteriormente '¿cómo podría inscribir a mi hijo en una de estas escuelas?' si es que claro no lo pensaría primero para poder entrar usted misma. La forma es simple: tiene que ser el deseo con la oportunidad. Y esta conjunción se da en muchos momentos de la vida. La escuela no tiene restricciones de edad, género, ideología, en fin, la escuela tiene claras restricciones pero por ahora no quiero hablar de eso sino más bien cómo fue mi selección.

Durante toda mi vida, lo sobrenatural me resultaba obvio que para mi bochorno tuviera muchos impasses con otras personas. Responder preguntas no dichas o felicitar noticias todavía no dadas. ¿Le ha pasado? Por favor responda sí, que de otra manera no me entenderá. Así, un día de "simpleza" cotidiana me puse a meditar a la luz de una vela y su resplandor fue inusual que realmente pensé para mí que este mundo no era solo mío. Decidido, busqué en cada persona el maestro adecuado. La lista fue inmensa. Créame que una vez miré detenidamente a un niño jugar en forma particular que pensé 'él podría ser mi maestro en disfraz'. Pero no, así no eran las cosas respecto a la selección.

Todo en su momento y es porque la escuela no puede darse el lujo de recibir gente que haga perder el tiempo y sólo llama y escoge personas que estén listas. A punto caramelo y yo pude. Fue camino hacia la biblioteca de mi universidad que cada uno de mis sentidos fueron exquisitamente cortejados con fragancias y colores; ruidos y sabores; el día era un embudo directo a la puerta de la magia y admito que si no hubiera sido generoso conmigo mismo quien sabe si los Maestros de igual manera lo hubieran sido con una segunda oportunidad. Llegué a preguntarle a una señora (al parecer en mendicidad) si había comido pues deseaba invitarle un pequeño refrigerio de la cafetería.

- ¿Me has visto cara de pordiosera?
- Por favor no lo tome a mal que siempre he pasado por aquí y nunca me atreví preguntarle su nombre pero creo que usted conoce de ya mucho tiempo esta escuela y tal vez usted..
- Ah.. bueno, eso sí.. yo conozco muy bien a todititos los que por acá han pasado alguna vez. Y sí, le he visto muchas veces con su mirada perdida. Un día se va a tropezar.
- Válgame -se me suelta una risa- pues sí, usted realmente tiene buen ojo. ¿Le gustaría contarme más historias de este lugar?
- Pero... qué dirán los demás.
- Usted los conoce, de pronto me lo dice mientras comemos un delicioso pastelillo.. o lo que usted desee. Hoy he tenido un poco más de dinero y quisiera sentirme a gusto con su compañía.

Por favor, no me juzgue con una sola acción o una conversación. Solo sé que ese día no pude ser de otra forma porque era lo más atractivo a todo mi ser vivir eternamente así. Por supuesto que era una selección y es la razón más importante de la escuela. Vivir para el servicio, ya que sólo para eso sacerdotes, militares, doctores, abogados, y muchos otros más fueran elegidos para hacer de su día a día magia de verdad.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Hermínedes

Del libro en producción "Ibara, escuela de magia"

Algo que recuerdo con mucho cariño de mi escuela era el orden. La organización de que cada cosa pase en su momento y lugar indicado. Aclaro lo de lugar porque usted seguro da por sentado que el horario sea lo que exprese puntualidad porque jamás se podría esperar que los sitios se movieran. En mi escuela sí. Y les explico.

Es que justamente hay clases que eran desconocidas para los estudiantes de menores niveles. Yo no supe de las mismas porque era parte del entrenamiento ocultar literalmente a los sentidos algunos salones de estudio. Hay que ser muy pero muy curioso para darse cuenta de esto. No es tema de conversación entre los estudiantes líderes pues por discreción, ellos estaban llamados a ser guías nuestros en todo tiempo y lugar. Logré pillar sin embargo a uno que otro impuntual que resignado no hacía el mínimo esfuerzo de encontrar la forma de entrar ni pedir disculpas ante el maestro por su atraso o descuido en la hora. Es que simplemente no podía el desgraciado ver la entrada. Uno de los maestros de estas clases era Hermínedes.

Conforme fueran pasando los años y así mis grados de conocimiento este tipo de materias serían de gran predilección para mí. No se asombre si le digo que para algunos, después de un tiempo, serían tan aburridas como las matemáticas. Hermínedes era mi maestro de ilusiones. Llegaba a paso lento y al sentarse, tomaba su pequeña boina y la ponía a un lado de su mesita de profesor. Era bajito. Nadie lo ubicaba en las reuniones. Con decirle que cuando vino un gran magistrado a oficiar las graduaciones, yo aproveché tomarme muchas fotos con mi maestro de ilusiones porque nadie le tenía predilección. Todos iban a por el gran magister. En fin, Hermínedes no hacía grandes gestos pero su tesoro estaba realmente en la boca del que preguntara con gran cuidado. Yo procuraba prestar atención cuando explicaba los secretos del adormecimiento de los sentidos y cómo se podía sacar provecho, más aún si me iba a dedicar a la prestidigitación. Su frase más común era 'crasa acción' al ver los descuidados movimientos de mis compañeros. Era tan hilarante que aunque lo dijera con voz paciente era en sí un perfecto insulto.

Un poco antes de graduarnos era importante descubrir al menos 3 sectores ocultos de todo el campus escolar. Con gran esfuerzo me fue bien en tal tarea pero no puedo decir que quedé satisfecho ya que no pude encontrar los otros más que seguirán ocultos quien sabe hasta cuándo.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

In the house of the Virgin

I found my self living in the house of the Virgin, Virgo. The time where childhood becomes adulthood. I just want right now everyone loves with a chocolate loving heart.
I think, I would like to achieve things I have never ever felt before like: being love<-- I know.. it is in a passive form of the verb but please understand my saying as a real demonstration of the willpower, at finding the significant one (for those who believe such things are possible).
Anyhow, I guess it is just the effect of the music I'm listening to.
I hope out there, you people, get the best of the day, of Thursday without waiting Friday. I hope you get love and bless. I hope you feel incomplete so tomorrow may bring you a better day.