sábado, 18 de diciembre de 2010

#Minicuento

Soñó que vivió una historia de hadas con cuento de final feliz, y nunca más se levantó.

Sopor

Hoy quiero encontrar todas las respuestas en el sueño.
De las partidas, de los encuentros.
Quiero rasgar la pared de lo evidente
y quedarme con lo absurdo.

Si es de caer en cielos ingrávidos
y verte en estrellas flotantes;
si es de flotar de nube en nube
para sentir mío el universo,
quiera el dios de los sueños,
el hada del silencio
la planta que murmure
el canto y el arrullo
en el sopor de esta noche.

Hoy me es la noche
y hoy todos me son dados,
regalados. Incluso
tú que fugado estás.
No se diga más que
un bostezo llama a por mí.
Oh pecho arrebatado,
sea hoy negado que volarás alto.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Misericordia

Un corazón grande no desea el sufrimiento del otro. El placer de los sentidos y del alma viene de un corazón misericordioso que sabe que no se merece ningún tipo de dolor en esta vida. Si tiene más apertura, se dará cuenta que su experiencia otro más también la podría vivir.

Un corazón grande se compadece y más aún, es valiente y sabe que el placer no se lo evita sino se lo recibe con gratitud del otro y del yo.

martes, 12 de octubre de 2010

El Señor de las Sonrisas

Para antes de irse a dormir a la cama. Con mucho cariño, para sus hijas e hijos.

Había una vez, al filo de un acantilado, una gran torre. Al frente de su planicie, se veía una gran muralla de restos de embarcaciones y carretas. Nadie sabía cómo habían llegado ahí pero espantaban a muchos curiosos.

Pocos sabían que dentro de aquella construcción viviría el Señor de las Sonrisas. Desde hace muchos años atrás, venían desde los pueblos más lejanos para que él les diera la sonrisa perfecta. Siempre les recibía con mucha atención tanto a la Reina ostentosa como al niño malcriado. Les regalaba la sonrisa que adornaría mejor según su nariz, su cabello y su olor. Hacía que el niño riera y arrancaba el jolgorio del gordo. La carcajada era la fiesta de gala. La hilaridad se servía en copas de vino. Quien pisara su casa saldría cambiado para toda la vida.

Un día, Lamento y Gemido, buscaron la forma de robarle la sonrisa a un pueblo entero pero descubrieron que nadie podía derramar una lágrima si no era de carcajada contagiosa. Llenos de rabia, buscaron al causante de tal suceso y al descubrir que el Señor de las Sonrisas tenía a esta aldea con tal buen humor, inmediatamente desearon matar su esperanza y alegría.

Se presentaron en su torre con la joya más preciada para que ponga ahí a resguardo su corazón pero desconocían que el Señor de las Sonrisas había ya entregado el suyo y por eso, cuando intentaron engañarle, en grande frustración Lamento y Gemido hicieron retumbar la región con fuertes truenos, temblores y vientos.

No sabemos mucho de dónde sacaba las sonrisas este gran maestro ni a quién habría entregado su corazón. Tampoco por qué una pila de maderos -recuerdo de viejas barcas y carrozas- estarían en la planicie. Una luz encendida se verá siempre desde lo lejos indicando que el Señor de las Sonrisas siempre tendrá una para el viajero que toque a su puerta.

Borja, ésta va para ti. Por la magia que sale de tu rostro.

viernes, 24 de septiembre de 2010

La selección

Del libro en producción "Ibara, escuela de magia"

Estoy seguro que se preguntó anteriormente '¿cómo podría inscribir a mi hijo en una de estas escuelas?' si es que claro no lo pensaría primero para poder entrar usted misma. La forma es simple: tiene que ser el deseo con la oportunidad. Y esta conjunción se da en muchos momentos de la vida. La escuela no tiene restricciones de edad, género, ideología, en fin, la escuela tiene claras restricciones pero por ahora no quiero hablar de eso sino más bien cómo fue mi selección.

Durante toda mi vida, lo sobrenatural me resultaba obvio que para mi bochorno tuviera muchos impasses con otras personas. Responder preguntas no dichas o felicitar noticias todavía no dadas. ¿Le ha pasado? Por favor responda sí, que de otra manera no me entenderá. Así, un día de "simpleza" cotidiana me puse a meditar a la luz de una vela y su resplandor fue inusual que realmente pensé para mí que este mundo no era solo mío. Decidido, busqué en cada persona el maestro adecuado. La lista fue inmensa. Créame que una vez miré detenidamente a un niño jugar en forma particular que pensé 'él podría ser mi maestro en disfraz'. Pero no, así no eran las cosas respecto a la selección.

Todo en su momento y es porque la escuela no puede darse el lujo de recibir gente que haga perder el tiempo y sólo llama y escoge personas que estén listas. A punto caramelo y yo pude. Fue camino hacia la biblioteca de mi universidad que cada uno de mis sentidos fueron exquisitamente cortejados con fragancias y colores; ruidos y sabores; el día era un embudo directo a la puerta de la magia y admito que si no hubiera sido generoso conmigo mismo quien sabe si los Maestros de igual manera lo hubieran sido con una segunda oportunidad. Llegué a preguntarle a una señora (al parecer en mendicidad) si había comido pues deseaba invitarle un pequeño refrigerio de la cafetería.

- ¿Me has visto cara de pordiosera?
- Por favor no lo tome a mal que siempre he pasado por aquí y nunca me atreví preguntarle su nombre pero creo que usted conoce de ya mucho tiempo esta escuela y tal vez usted..
- Ah.. bueno, eso sí.. yo conozco muy bien a todititos los que por acá han pasado alguna vez. Y sí, le he visto muchas veces con su mirada perdida. Un día se va a tropezar.
- Válgame -se me suelta una risa- pues sí, usted realmente tiene buen ojo. ¿Le gustaría contarme más historias de este lugar?
- Pero... qué dirán los demás.
- Usted los conoce, de pronto me lo dice mientras comemos un delicioso pastelillo.. o lo que usted desee. Hoy he tenido un poco más de dinero y quisiera sentirme a gusto con su compañía.

Por favor, no me juzgue con una sola acción o una conversación. Solo sé que ese día no pude ser de otra forma porque era lo más atractivo a todo mi ser vivir eternamente así. Por supuesto que era una selección y es la razón más importante de la escuela. Vivir para el servicio, ya que sólo para eso sacerdotes, militares, doctores, abogados, y muchos otros más fueran elegidos para hacer de su día a día magia de verdad.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Hermínedes

Del libro en producción "Ibara, escuela de magia"

Algo que recuerdo con mucho cariño de mi escuela era el orden. La organización de que cada cosa pase en su momento y lugar indicado. Aclaro lo de lugar porque usted seguro da por sentado que el horario sea lo que exprese puntualidad porque jamás se podría esperar que los sitios se movieran. En mi escuela sí. Y les explico.

Es que justamente hay clases que eran desconocidas para los estudiantes de menores niveles. Yo no supe de las mismas porque era parte del entrenamiento ocultar literalmente a los sentidos algunos salones de estudio. Hay que ser muy pero muy curioso para darse cuenta de esto. No es tema de conversación entre los estudiantes líderes pues por discreción, ellos estaban llamados a ser guías nuestros en todo tiempo y lugar. Logré pillar sin embargo a uno que otro impuntual que resignado no hacía el mínimo esfuerzo de encontrar la forma de entrar ni pedir disculpas ante el maestro por su atraso o descuido en la hora. Es que simplemente no podía el desgraciado ver la entrada. Uno de los maestros de estas clases era Hermínedes.

Conforme fueran pasando los años y así mis grados de conocimiento este tipo de materias serían de gran predilección para mí. No se asombre si le digo que para algunos, después de un tiempo, serían tan aburridas como las matemáticas. Hermínedes era mi maestro de ilusiones. Llegaba a paso lento y al sentarse, tomaba su pequeña boina y la ponía a un lado de su mesita de profesor. Era bajito. Nadie lo ubicaba en las reuniones. Con decirle que cuando vino un gran magistrado a oficiar las graduaciones, yo aproveché tomarme muchas fotos con mi maestro de ilusiones porque nadie le tenía predilección. Todos iban a por el gran magister. En fin, Hermínedes no hacía grandes gestos pero su tesoro estaba realmente en la boca del que preguntara con gran cuidado. Yo procuraba prestar atención cuando explicaba los secretos del adormecimiento de los sentidos y cómo se podía sacar provecho, más aún si me iba a dedicar a la prestidigitación. Su frase más común era 'crasa acción' al ver los descuidados movimientos de mis compañeros. Era tan hilarante que aunque lo dijera con voz paciente era en sí un perfecto insulto.

Un poco antes de graduarnos era importante descubrir al menos 3 sectores ocultos de todo el campus escolar. Con gran esfuerzo me fue bien en tal tarea pero no puedo decir que quedé satisfecho ya que no pude encontrar los otros más que seguirán ocultos quien sabe hasta cuándo.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

In the house of the Virgin

I found my self living in the house of the Virgin, Virgo. The time where childhood becomes adulthood. I just want right now everyone loves with a chocolate loving heart.
I think, I would like to achieve things I have never ever felt before like: being love<-- I know.. it is in a passive form of the verb but please understand my saying as a real demonstration of the willpower, at finding the significant one (for those who believe such things are possible).
Anyhow, I guess it is just the effect of the music I'm listening to.
I hope out there, you people, get the best of the day, of Thursday without waiting Friday. I hope you get love and bless. I hope you feel incomplete so tomorrow may bring you a better day.

domingo, 8 de agosto de 2010

Sin miedos parte 2


Una mirada directa a los ojos es lo que necesita el alma para verse frente a frente, una a otra, ventana a ventana.

En Manabí, tierra de mis ancestros, me metí aprehensivo en la madre tierra. Pero al resto no le importaba, al menos un ave por ahí me lo hizo ver con tanto canto sin que le importe un pepino si tenía público o no.

En el campo lo rojo es rojo y el resto no es rojo. Usted saluda siempre, pita cuando pasa a otro carro y así se tome el tiempo da de la mano a todo el mundo. La gente le conoce de su nombre que tiene de apellido un sin número de anécdotas y el más joven tiene años y años y muchos años que el más envidioso de la eterna juventud no podría arrancar de esta tierra un poco el secreto de la longevidad en al menos gotas o frasco para vender.

El día se termina con el sol y poco antes de la aurora se saca a comer a su vaquita como al perro de la ciudad, en días de sol o en las tormentas de agua hasta la cintura. La naranja se regala al viajero y se reclama el saludo del que descuidado no percata al amigo pasar en motoneta con ávido saludo.

No creo que en Tierra exista esperanza sino se la cree porque es un planeta de muerte y vida. De práctica, de recordatorios y oportunidades. En Manabí de eso me acordé.

jueves, 5 de agosto de 2010

Sin miedos parte 1

No sé que tan buena sea la prosa que devele el corazón triste o peor aún la del autor dolido.

Quiero hacer honra a que esta bitácora sea para la literatura y en lo posible, dejarle su vista fluir en las letras que ahora no pujan lírica sino solo narrativa.

Será mi ser de viento que se arremolina a menudo y vuela alto. Y se afecta de ver lejos. ¿Es posible ver que el amor se necesite ratificar en un entorno porque unos pocos lo consideran exclusivo al hombre y mujer de tal forma que el matrimonio entre personas del mismo sexo sea motivo de odio? Realmente, antes no veía qué significaba esto, en sí, porque doy por sentado que otros tienen la misma perspectiva e intuición que tengo y que son capaces de valorar el ser humano, el alma, el interior. En fin, alma ilusa que olvida fue un día ternera con muchos defectos -no se diga conserva muchos más y otros los acumula- pero sin deseo del daño al prójimo.

Ahora me he sentido triste de vivir en un mundo que me es hostil en todas las formas posibles. El otro, el color, la altura, el pensamiento, todo es causa de miedo. Me gustaría criar niños con gusto a lo distinto y felices del miedo. Que el temblor les cause fascinación por Tierra; un trueno sea adrenalina revitalizante; que un bu! no falte en sus labios.

¿Se necesita realmente que esta persona que escribe una letra más esté en este plano para alegría de algunos pocos y odio de muchos? Si ni de la familia se ve la misericordia, ¿se la puede esperar del desconocido? Si se mata al hermano, al hijo, al padre, ¿es la esperanza sentido de vida?

Tal vez un Cristo sea constante en cada generación que haga sentir que aquel odiado está en el amigo querido que conocíamos, el amigo que amábamos, el hijo que cuidábamos, la madre que añoramos, y si es de crucificarlo para que esta generación se despierte, roguemos que su resurrección sea igual al tercer día.

*Esta entrada se la dedico con mucho cariño y calidez a todos los que ahora se ven bendecidos con la derogatoria de Prop8 en el estado de California. A ustedes mis oraciones y benditos los que vieron que por fuera somos diferentes pero que el alma ama más que a través de un simple beso.

viernes, 16 de julio de 2010

Quiero abrazar una vaca

Es tan gracioso que la gente no pueda pensar ver un animal de granja y darle otro uso que el consumo alimenticio para sí mismo. En serio, es para mí a veces frustrante y enfurecedor que no vean una vaca pastar y nada más, sin otro fin que ella viva. O mejor dicho, porque así es la sociedad en la que vivo, dejarla vivir.

Un cerdo, una pato, una oveja criadas nada más para que vivan. Tal vez usted se pregunte: ¿pero para qué? Lo mismo diría yo de su gato, su perro, su canario. Pero así están nuestras mentes, configuradas de tal manera que no podamos pensar en la belleza del ser vivo tanto así que un ser humano en desgracia tampoco nos afecta, ni siquiera porque nos pida algo de comer al limpiar nuestras ventanas cuando tenemos el auto en espera ante el semáforo en rojo.

Tuve la oportunidad de conocer por medio de un video que abajo comparto, una granja que protege animales. Incluso, sus mismos animales se nutren entre sí y se dan aliento (escuchar sobre la oveja que cuida a la otra). Sería una afrenta para algunos creer que la compasión y la auto estima se la aprenda de estas pequeñas criaturas y ose un ser humano decir que fue uno de estos animalitos quien le haya enseñado estas prácticas pero aquí, en esta granja pasa esto. Niños son beneficiados de la interacción con la naturaleza. Como dice en su página de internet, desean colaborar para que el niño descubra que la diferencia es exterior pero somos todos iguales en derechos y belleza en lo más íntimo de nuestro ser. Y de ahí mi deseo que usted pueda tener también esta experiencia.

Disfrute entonces, la belleza de la vida. The Gentle Barn, la granja amable (ver su sitio en red aquí).

Segundo(s)

A veces literalmente puedo sentir que se está volando por encima de nuestros propios prejuicios y la belleza, y la moral, y la forma de pensar constituida por el entorno. Si un insulto llegase a mí no podría atravesarme; una idea sería vista como en laboratorio de tal forma que la podría posar, tender, diseccionar, descartar. Y me veo ajeno donde mi piel sea inerte y el agua fría sea recuerdo que no me afecta más allá que la transmisión de un estímulo externo hasta lo más interior de mis sentidos.

Ideas. Acciones. Percepción. Todo se reduce por segundos a un ente observador no afectado, incluso que se sabe inmerso al entorno y uno más, y aún así, parte de la fórmula o la ecuación sin miedo a los resultados finales.

miércoles, 14 de julio de 2010

Buena mar

Te fuiste. Tuve la dicha de la despedida en puerto. Una bendición que los guerreros no suelen tener. La calma, la paz no es de mi agrado. Soy de sangre en rostro y espada en mano.

Ahora que me quedo abandonado sé que la magia de mi beso no fue suficiente para no dejarte ir. No hay hombro al cuál llorarte.

Espero que ahora donde estés recibas la dicha que te mereces. Buen viaje, buena mar.

martes, 22 de junio de 2010

El ciclo del amor

Había una vez, una hermosa rosa. De pétalos grandes y perfumados. No tenía ninguna espina lo que la hacía la más atractiva de todas. Ella había nacido en un prado mágico donde su tierra le permitía crecer poderosa e indestructible de tal manera que cualquier mano que quisiera arrancarla no lograba de ninguna forma dañar su figura en lo más mínimo.

La rosa era feliz al pasar de los días porque tenía a su lado un hermoso geranio que le regalaba momentos eternos de gozo, en relatos y lenguas de enamorados. Incluso en las noches más obscuras donde su geranio amado dejaba de brillar en colores, su fragancia le era recuerdo del rostro que vería en la mañana.

Un día, un frío día, los demás seres del prado comenzaron a huir de helados vientos que venían de todos lados. Las aves volaban a tierras más cálidas y por eso, en gran tristeza los árboles perdían el deseo de sostener las hojas en sus brazos que daban cuidado y hogar a sus amigas aladas. Y así, poco a poco, cada una de las flores empezaron a inclinar su rostro al piso y decidir poner fin a tal desdicha.

La rosa, con ojos de angustia, buscó a su geranio pero éste ya se había marchado. La había abandonado y en ese día una lágrima final dejó caer la rosa. Pero ella, ella poco antes pensó que esto no podría terminar así porque había tenido una vida tan feliz y prometió remediar todo esto de alguna forma, de alguna manera.

Se sabe que la nieve borró todo recuerdo de lo que fuera un día el hermoso prado de las flores y un manto blanco era lo único a la vista. Todas las flores habían muerto, pero un día, el calor regresó.

Esa última lágrima que rosa había derramado en el piso fue su deseo final de felicidad a pesar de toda angustia. Y así, una pequeña y nueva flor empezó a brotar del suelo. Al principio, un poco mareada, pensaba que era un mundo nuevo que se abría a sus ojos pero luego ella recordó. Recordó su vida pasada, sus tristezas pero así mismo, sabía que con ella pronto despertaría su geranio amado. No fue mucho que mientras pensaba estas palabras un aroma familiar llegaría a dibujar una sonrisa en nuestra rosa querida.

domingo, 20 de junio de 2010

Cumbia

Canción, como si fuera cumbia, música chichera, pero de esas que te hacen reír. Bailable en quinceañeras y bodas de oro.

Al final me doy cuenta
que resultas de alto costo
en la eterna espera
de tu lento querer.

La promesa de la playa
del paseo a la montaña,
forma cruda y cruel
de tu lento querer.

No te apures en la prueba
del me quieres o no.
Prefiero amor y me alejo presto
de tu lento querer.

Con aprecio te recuerdo
tonto yo espero aprender
que me saque de la mente
el que siempre te querré.

Ensayo a Saramago

No he sido amante a la literatura clásica sólo por el hecho que sea escritor -a mucha honra porque escribo- y soy interpelado en varias ocasiones a la lectura recomendable. No leo a los grandes sino a mis maestros y Saramago vaya que lo ha sido, en un basto despliegue de creatividad y mordacidad. Lo último que es lo mío. He tenido la ventaja, si así fuera, de dejarme enamorar por cada nuevo escritor y como en toda relación, si no me siento interesado es mejor decirle un agradecido adiós. Usted lector o lectora no me reprenda por no querer a su Cortázar, García o Cervantes. Su pulso no fue fuerte para calar en mis hábitos y de a poco, ellos quedaron como propósitos de fin de año en algún estante o repisa de mi oficina.

Saramago ha tenido la valentía del gruñón. Un "mando a la mierda todo" mezclado con "te escribo esto porque realmente quiero entretenerte". Fue el primer escritor que logró hablarme y descubrirme lector. Como si mi escondite al frente de las páginas hubiera sido descubierto por un: te encontré. Con Ensayo sobre la lucidez me vi en un mundo nuevo de la historia de la literatura, con un empleo del lenguaje hablado en forma de tinta. Como él mismo dijera como remedio al desorientado: "Les digo que lean mis libros en voz alta y entonces agarrarán el ritmo, porque esto es oralidad escrita. Es la versión escrita del modo en que la gente se cuenta cuentos entre sí".

José Saramago ha fallecido el 18 de junio de 2010, a los 87 años y a penas he leído dos libros suyos. Tengo mucha dicha por delante con su obra.

miércoles, 9 de junio de 2010

Busto al amor

Yo creo en el amor. Me he vuelto un ferviente creyente y estoy dispuesto a dar mi vida para que la gente crea que existe, vive el amor en los sujetos que así deseen. Porque es cosa de querer, de voluntad, de expresarlo en pensamientos e ideas que incluso llegan a la acción tácita o activa.

Estoy rodeado de personas que a menudo pierden esta visión. Se fatigan, se olvidan incluso que tocaron con sus dedos al amor. Que el amor tocó su alma en formas que el más presto de los sentidos no podría explicar; vergüenza y envidia del tacto.

Yo no reniego del amor ni lo resiento. Hoy me he acordado de buscarle en las más ínfimas expresiones que la pareja ha de manifestar en mi siguiente momento ahí frente a mis ojos. Y le identifico, le aprecio, le veo los bordes y las formas; está en la mirada cómplice del amante eterno que te regala la sonrisa y el guiño; en el toque de frentes; en la lágrima del que se despide; en el abrazo del pecho fatigado.

Oh amor, hoy te quiero encontrar otra vez y ponerte un momento en bandeja; tomarte fotografía y huella digital; hacerte figura.

lunes, 7 de junio de 2010

Indomable

Gracias, Alfonsina Storni. Recordándote a tu salud.

Tú me quieres blanca


Tú me quieres alba,
me quieres de espumas,
me quieres de nácar.
Que sea azucena
sobre todas, casta.
De perfume tenue.
Corola cerrada.

Ni un rayo de luna
filtrado me haya.
Ni una margarita
se diga mi hermana.
Tú me quieres nívea,
tú me quieres blanca,
tú me quieres alba.

Tú que hubiste todas
las copas a mano,
de frutos y mieles
los labios morados.
Tú que en el banquete
cubierto de pámpanos
dejaste las carnes
festejando a Baco.
Tú que en los jardines
negros del Engaño
vestido de rojo
corriste al Estrago.

Tú que el esqueleto
conservas intacto
no sé todavía
por cuáles milagros,
me pretendes blanca
-Dios te lo perdone-,
me pretendes casta
-Dios te lo perdone-,
¡me pretendes alba!

Huye hacia los bosques,
vete a la montaña;
límpiate la boca;
vive en las cabañas;
toca con las manos
la tierra mojada;
alimenta el cuerpo
con raíz amarga;
bebe de las rocas;
duerme sobre escarcha;
renueva tejidos
con salitre y agua:

Habla con los pájaros
y llévate al alba.
Y cuando las carnes
te sean tornadas,
y cuando hayas puesto
en ellas el alma
que por las alcobas
se quedó enredada,
entonces, buen hombre,
preténdeme blanca,
preténdeme nívea,
preténdeme casta.

jueves, 3 de junio de 2010

Sol

Hoy quiero enamorarte. Vienes a mí cada mañana pero por más cotidiano que seas, te aprecio. Te anhelo desde que ya brillas como aurora. ¿Es acaso tu coquetear ponerte más obscuro antes de estallar en colores? Y aveces te ocultas; otras, sofocas. Eres hermoso. Pero en fin, hoy quiero enamorarte. Baja tu mirada y por un momento, desdeña al resto. Sí, solo yo. Hoy te quiero regalar la flor que te espera. Hoy quiero que sepas que eres vida y si bien pronto te me puedas ir, es mi esperanza verte. Quiero ser domesticado.

lunes, 17 de mayo de 2010

Después de un segundo

No te lo había dicho antes porque aprecio tu cara de sorpresa en este momento.

Borra lo dicho y va de nuevo.

No te lo había dicho antes porque no pones etiquetas en la frente de las personas. Al que hoy te hizo daño mañana lo ves con nuevos ojos. ¿Por qué tendría yo que violentar tu inocencia?
Además, soy yo el primero en declarar lo absurdo del absoluto: el alto, el bajo, el gordo, el flaco. Mas ya era hora, y sucede cuando tienes la dicha de compartir conmigo lo que es una alegría personal. No conoces esta arista -dijera González- sino el alcance de mi corazón, que ahora, descansa (finalmente) en puerto seguro.

Borra lo dicho y va de nuevo.

No te lo había dicho antes porque ahora aprecio más tu cara de no sorpresa en este momento.

martes, 27 de abril de 2010

Refugio

Me arrimé a ti mi querido árbol de vida, y soñé.

- Árbol, ¿con qué derecho me haces nacer en tus ramas como flor de primavera? Es invierno y la nieve todavía no ha caído.

Y no hubo respuesta. Pero no me molestó sentir el frío. Su temperatura quebraba el pétalo, la rama. Flor inaudita. Flor desnaturalizada. Flor hermosa y única.

Estoy aquí porque tú lo quieres y pronto vendrá el calor, el sentido común que me hará marchitar. Bendita locura.

Y desperté de tu espaldar. Oh árbol, gracias.


jueves, 25 de febrero de 2010

Pétalos

Nació en medio de la espina, la roca. El suelo fuerte fue amigo e hizo hermosa su figura.

miércoles, 6 de enero de 2010

Placer


Alguna vez acuñé la frase: "Sólo me causa placer el talento humano. El resto es sólo paisaje". Y qué pasaría si ese paisaje se perdiera por mano humana. Lamentable.

Hoy, estamos en el siglo XXI. Muchas especies se están matando al punto de la extinción. Más del 90% de los predadores de los mares han sido eliminados. ¿Qué estamos haciendo por Tierra? Bueno, más bien es una pregunta personal que no espera respuesta. Sólo me la hago a mí mismo como un ser vivo más que desea compartir un puesto en este planeta.

Lo más cercano a la experiencia de volar es el buceo. Tenemos océanos, mares, ríos, lagos. No soy mucho del agua pero sí del aire. Y sé que no me gustaría perder la oportunidad de volar si así pudiera llamarlo, sólo porque ya no haya lugares para hacerlo.

Año dos mil diez. Un número muy interesante. Exacto a mi fecha de cumpleaños. Me reafirmo una vez, un año más en ser vegetariano. No estoy en contra de comer los animales. Yo al menos no quisiera que se maten más de los necesarios pero no es el caso de lo que sucede en este mundo.

Es verdad, creo que sólo el talento humano me causa placer. El paisaje me da refugio. Ahí mi mente vuela. Espero tener el placer de ver en el paisaje el talento puesto al cuidado del mismo.

Saltando sueños

Para antes de irse a dormir a la cama. Con mucho cariño, para sus hijas e hijos.

Sabías que una noche, una niña hizo caso a su mamá y se fue temprano a la cama. Se lavó sus dientes por supuesto e hizo todas sus tareas en el día, y por eso, pudo dormir muy contenta. Cuando se durmió, primero vio muchas luces y un campo de flores. Detrás de algunos árboles, un puente muy hermoso de cristales de muchos colores y brillos.

Al cruzar este puente, escuchó una canción hermosa:
"Pasa cantando.
Felices somos
los que jugando
hacemos bien
a todos".

Y de pronto, se encontró en un hermoso castillo. Ahí había otro niño que se fue a la cama temprano. La niña lo saludó y le preguntó:
- ¿Cómo te llamas?
- Yo me llamo Oren. Y, ¿tú?
- Quila

Los niños jugaron en el mundo de los sueños. Oren le enseñó a volar a Quila y juntos fueron hasta la Luna y las estrellas. Quila le enseñó a Oren cómo hacer dulces encima de las nubes, y cómo hablar con los animales.

Una voz se escuchó en el sueño: "Es hora de despertarse. ¡Pronto, a sus camas!" Y así, ambos se fueron directo a sus casas dentro de los sueños.

Sabías que esa niña le contó esta historia a su mamá y a su vez, ella me la contó. Pero el secreto para saltar al mundo de los sueños no lo sé todavía. Si tú lo descubres, ¿me lo contarías?